Iluminación jardín vertical: guía práctica

Proyectar la iluminación de un jardín vertical requiere tener en cuenta una serie de factores de calado. Hay que saber combinar la luz natural con la artificial, escoger bien el tipo de plantas y estudiar las condiciones que necesitan para crecer con vigor. También resulta básica la adaptación al entorno y la distribución de las luminarias. ¿Qué otras cuestiones resultan importantes para que todo quede perfecto desde el punto de vista técnico y estético?
En este artículo trataremos...
- Cómo debe ser la iluminación de un jardín vertical
- Consejos y aspectos técnicos más importantes
- Tipo de iluminación recomendada
- Productos adaptados y de horticultura de SECOM
Cómo debe ser la iluminación de un jardín vertical
La iluminación de jardines verticales puede englobarse en la de jardines en general y también en el ámbito de la horticultura. Por lo tanto, hay toda una serie de luminarias específicas que cumplen una función primordial. Se ocupan de proporcionar a las plantas la luz que necesitan para el proceso de fotosíntesis. Sobre todo, son necesarias cuando no hay posibilidad de que a ese espacio lleguen los rayos del sol. Además, tienen que estar funcionando durante unas 12 horas seguidas con unos 2500 lux. De igual manera, han de dejar periodos de oscuridad, correspondientes a las horas de la noche.
Pueden utilizarse proyectores downligths, bañadores de pared, empotrables y otras muchas variaciones. Hay una enorme cantidad de dispositivos adaptables. El único requisito irrenunciable es que han de reproducir adecuadamente el espectro solar.
Por otro lado, hay otros dos factores que siempre se han de tener en cuenta:
- La temperatura de color, que se mide en kelvin (K). Con unos niveles entre 3000 y 5000 K se consigue un espectro muy similar al de la luz natural. Así se logra un desarrollo evolutivo normal de la planta.
- El índice de reproducción cromática (CRI). Con un valor a partir de 80 se reproducen los colores de las plantas con una buena precisión. Es muy parecido al de la luz natural.
Sumado a todo esto, existen programas de cálculo de iluminación para determinar la intensidad y la homogeneidad. Lo ideal es informarse sobre el valor de luz diaria integral (DLI) para las plantas que se vayan a utilizar. Así se conoce la luminancia requerida. Hay otros indicadores del mismo tipo, como el PPFD o densidad de flujo de fotones fotosintéticos.
Consejos y aspectos técnicos más importantes
Hay aspectos técnicos que se han de valorar en todo caso. Por ejemplo, la distribución espectral o la luminosa óptima, siendo la wallwash o la oval flood las aconsejables. En la misma línea están la distribución de las luminarias y la orientación.
Intensidad
Respecto a este parámetro, en interiores la intensidad mínima recomendada oscila entre 2000 y 2500 lux. Esto es aplicable a toda la extensión del jardín. La medición puede llevarse a cabo con un luxómetro.
Temperatura
Este factor influye en la velocidad y fuerza con la que crecen las plantas. Por lo tanto, su importancia es crucial. El sol proporciona unos 5000 K a mediodía, pero si se habla de un sistema artificial, se recomiendan los 6500 K.
Tipo de plantas
A la hora de escoger el tipo de plantas, se cuenta con numerosas opciones. Lo ideal es colocar varias que tengan bajas necesidades lumínicas. Así podrán crecer y desarrollarse con normalidad con márgenes cercanos a los 1500 lux artificiales.
Entre las especies idóneas en este sentido están las siguientes:
- Aspidistra.
- Calatea.
- Cinta.
- Helecho.
- Maranta.
- Costilla de Adán.
- Poto.
Son solo algunas de las muchas existentes. Lo importante es considerar la estética que se desea lograr y la cantidad y tipo de iluminación necesaria.
Tipo de iluminación recomendada
En muchos casos es posible combinar la luz del día con la artificial, mientras que en otros hay que ceñirse únicamente a esta segunda opción. Por ello, es importante adquirir los dispositivos que reúnan las condiciones adecuadas. No solo tienen que lograr estimular el proceso de crecimiento natural de las plantas, también han de contribuir al realce estético. Por lo demás, aunque normalmente estos espacios se encuentran en zonas interiores, a veces es recomendable utilizar luminarias con un IP alto. Esto supone una alta resistencia a la humedad y los golpes.
Los siguientes factores son esenciales:
- Calidad lumínica.
- Intensidad de la luz.
- Fotoperiodo.
Asimismo, hay que proyectar una iluminación principal y otra auxiliar, con diferentes intensidades y densidad de flujo de los fotones fotosintéticos. También se requiere instalar luminarias que proyecten una longitud de onda adecuada. De la misma manera, se puede mezclar focos centrados en plantas específicas y otros con una distribución más amplia y general.
La tecnología LED se encuentra entre las más utilizadas en la actualidad para este fin. Entre las razones está la gran versatilidad y adaptabilidad de los dispositivos. A esto se suma su gran eficiencia energética, que logra niveles de ahorro que rondan el 80 % con otros sistemas convencionales.
Además, centan con múltiples posibilidades de automatización. Se pueden incluir sensores de presencia, temporizadores para automatizar periodos o ciclos y personalizar las condiciones del ambiente. De esta forma se controla la duración y la intensidad al gusto del director del proyecto o según las necesidades del espacio. Igualmente, incrementa los márgenes de ahorro en la factura de la luz, al optimizar el uso.
Productos adaptados y de horticultura de SECOM
En SECOM pueden encontrarse soluciones muy diversas para iluminar estos espacios. Algunas son las siguientes:
- Aliket Basic: sistema de línea continua para interior.
- Allur: luminaria de interior con diseño moderno para luz indirecta.
- Lartub: dispositivo para interior, tanto para superficie como para colocarlo en suspensión.
- Twin: producto para empotrar con unas magníficas prestaciones y tecnología de vanguardia.
- Boxter: proyector LED para interior.
- Loop Supra: luminaria para instalación empotrada.
- Minicom: dispositivo para empotrar.
Las combinaciones posibles son muchas cuando se desea llevar a cabo un proyecto de iluminación de un jardín vertical. Por eso, es recomendable solicitar asesoramiento de técnicos especializados, para encontrar las soluciones más eficaces y útiles. Hay dispositivos LED especialmente pensados para este tipo de superficies. Así que lo mejor es informarse de todas las opciones disponibles y, a continuación, escoger en función del tipo de jardín, el entorno y la cantidad de luz natural disponible.
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